Curas diarias de vías periféricas

¡Hola a tod@s! Soy Marta y en esta entrada os voy a comentar cómo se realizan las curas de las vías periféricas según el protocolo de la planta de Neurología.

Hay cuidados al paciente que son necesarios diariamente. Entre ellos, algunos de los que ya me han dejado realizar fue la cura de las vías periféricas.

Para cualquier acción que se vaya a realizar es fundamental tener todo el material necesario para que esté al alcance cuando se precisan. Además, la técnica de estas curas va a depender del protocolo de cada unidad.

En mi caso, primero se coge una batea en la que se va a meter: el antiséptico clorhexidina alcohólica para desinfectar la zona y limpiar si hay restos de sangre (mejor que clorhexidina acuosa, ya que tiene el poder desinfectante y desengrasante del alcohol y esto permite que se peguen mejor los apósitos); dos apósitos pequeños de algodón; un apósito transparente; unas tiras steri-strip; y unas tijeras.

          Clorhexidina alcohólica

Apósito de algodón

        Apósito transparente

                      

Tiras Steri-strip

Al llegar junto al paciente se observa que es recomendable cambiarle los apósitos de la vía, bien porque están sucios, despegados, con sangre..., se le informa de que lo que se le va a realizar y nos aseguramos de que el médico no haya pautado la retirada de la vía, de que no hay signos de flebitis o de que la vía le haya producido algún daño. Una vez nos aseguramos de todos estos datos, procedemos a quitarle los apósitos que tiene pegados, pero con mucho cuidado de que al tirar no saquemos el catéter.

Se le aplicará el antiséptico y se extenderá por la piel con una gasa y se debe secar sobre todo la zona en la que se van a pegar los apósitos. Cuando esté seco, se coloca por debajo del catéter y sobre la piel uno de los apósitos de algodón doblados por un lado, para que no roce con la piel; para sujetar el catéter y el apósito, se pega sobe ellos las cintas Steri-strip. Para que esa parte quede sujeta del todo, se pega sobre ella la mitad del apósito transparente que cortaremos con la tijera. Es importante pegar sobre la zona de incisión del catéter un apósito que nos permita ver si hay algún signo de infección, para poder tratarlo antes de que el daño sea mayor. Para fijar la alargadera, es importante colocar bajo la llave de tres pasos un apósito de algodón para proteger la piel y no roce (sobre todo en personas mayores donde la piel es más débil y sensible), este sistema se fijará con la otra mitad del apósito transparente.

Es muy importante estar atentos a los signos de la flebitis e inflamación, para ello es fundamental tener en buen estado el material que la mantiene y una buena desinfección de la zona.

Además, como está en contacto con la sangre, es muy probable que se formen coágulos y obstruya el conducto, esto puedo impedir el paso correcto de sueros o medicación intravenosa. Cada vez que se se cambie de medicación o suero debe limpiarse todo el sistema introduciendo suero o Fibrilín sustancia que contiene una muy pequeña cantidad de heparina.